No Lo Abras | Crítica: adolescencia y posesiones demoníacas

No Lo Abras es el debut cinematográfico del guionista y director Bishal Dutta. Una historia de terror y posesión demoníaca, a través de la exhaustiva mirada de una adolescente que debe lidiar con las complejidades culturales de ser inmigrante y el sentir de no pertenecer socialmente. A continuación, puedes leer nuestra crítica de No Lo Abras.

Samidha (Megan Suri) es una adolescente hindú-americana, que vive en un tranquilo suburbio con sus conservadores padres. Poco a poco, las inseguridades culturales de Sam comienzan a crecer debido a su examiga, Tamira (Mohana Krishnan), quien, misteriosamente, lleva consigo un frasco de vidrio vacío todo el tiempo. En un momento de ira, Sam rompe el frasco y sin darse cuenta, desata una antigua fuerza demoníaca que secuestra a Tamira. Sam, desesperada, comienza a buscar a su amiga siguiendo el rastro de un fallecido joven hindú que, hace un tiempo realizó un ritual muy similar.

Es así como la entidad demoníaca se da cuenta y comienza a acecharla, destrozando su realidad a través de visiones aterradoras. La única opción que le queda es unirse a sus padres y a su comprensiva maestra para salvar a Tamira y ponerle fin al terror.

Una historia bastante arriesgada

En la larga línea del cine de terror contemporáneo, No Lo Abras emerge como una historia inquietante que desafía lo convencional del género. Desde los primeros minutos la película teje una red de suspenso que envuelve al espectador en una atmósfera un tanto claustrofóbica, pero que a ratos quita la tensión al no lograr transparentar su real enfoque. Demuestra una puesta en escena dentro de la cultura hindú, por su protagonista, pero que, lamentablemente, a primera instancia no se logra hilar muy bien con la trama de terror.

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El director construye el suspenso de la historia mediante un uso bien logrado del espacio, con colores oscuros, y por sobre todo, con muchas instancias de silencios, creando una experiencia sensorial que mantiene la expectativa visualmente. Cabe destacar que en ningún momento se le da la oportunidad a los personajes, ni siquiera a la protagonista, de profundizar en su historia, transformándose en personajes bastante superficiales, incluyendo al ser demoníaco que los asecha, dejando un leve vacío en la historia de su procedencia y quitándole veracidad.

A pesar de la falta de profundidad de sus personajes, las interpretaciones del elenco logran la credibilidad de la mayoría de los hechos, aunque no en su totalidad. Se nota la química entre algunos personajes, intensificando el impacto de cada giro narrativo dentro de la historia, aunque algunas escenas parecen ser un poco forzadas.

Falta de credibilidad demoníaca

Dentro de la narrativa de terror, se han creado muchas historias sobre posesiones demoníacas, las cuales rara vez son explícitas, dándole la oportunidad al espectador de crear en su mente la imagen que más los pueda perturbar. En No Lo Abras se describe a un monstruo, del cual en primera instancia se desconoce su procedencia, no tiene forma, ni tampoco se sabe con exactitud cuál es su objetivo. Ocasionando que todas las escenas anteriores, que poseen una alta dosis de suspenso, queden en nada. Con el pasar de la historia, se va conociendo al monstruo que asecha a las protagonistas, con una dualidad bastante extraña en su forma de actuar y que no genera miedo en lo absoluto. Más aún, que en la parte final se presenta visualmente, con una forma física muy mal ejecutada e innecesaria.

No Lo Abras, una película que posee una historia base con un alto potencial, culturalmente hablando, pero que no logra con sus objetivos dentro de la narrativa del terror. Posiblemente, no se transformará en una obra de culto, pero entrega una historia para pasar el rato, sobre todo, para los amantes del terror, para generar instancias de conversación y debate.

No Lo Abras se encuentra disponible en los principales cines del país.

A continuación, el tráiler oficial de No Lo Abras: