Priscilla | Crítica: ¿una idílica historia de amor?

Basada en el libro autobiográfico de 1985 Elvis and Me, escrito por Priscilla Presley, que relata la oculta historia de Priscilla siendo la esposa, en su momento, del difunto rey del rock. Una película muy esperada por los fanáticos, no tan solo por su trasfondo, sino también, por las ansias de saber cómo Coppola logra narrar desde una perspectiva mucho más profunda y melancólica, como es habitual de ver en sus películas, la vida al lado de Elvis. A continuación, puedes revisar nuestra crítica de Priscilla.

Antes de ser conocida como Priscilla Presley, existió Priscilla Ann Beaulieu Wagner (Cailee Spaeny), una típica joven adolescente residente en Alemania, por motivos laborales de su padrastro. En una fortuita fiesta, conoce a Elvis (Jacob Elordi), el cual queda flechado por la belleza, timidez y el encanto de Priscilla. Con el paso del tiempo, el famoso cantante hace hasta lo imposible para conseguir que los padres de la joven le den el permiso de cortejar a su hija. Es así como logra su cometido para, posteriormente, convertirla en su flamante esposa. La vida al lado de Elvis no siempre fue un cuento de hadas y Priscilla le da vida a su silencioso relato.

Una inocencia interrumpida

Mucho se conoce sobre la vida de Elvis, sus aciertos, su evolución en la música y el cine, trayendo consigo muchos desaciertos, angustias, pérdidas y mucho más. Con el pasar del tiempo, poco se habló de la mujer que lo acompañó a lo largo de su carrera y vida; es así como Sofia Coppola decide darle voz a la historia de Priscilla Ann Beaulieu Wagner, la actual viuda del cantante.

Una película que narra en 113 minutos cómo la juventud de la joven estadounidense, interpretada por Cailee Spaeny (Mare of Easttown, 2021) es interrumpida, condicionándola a vivir una vida de adultos al lado de Elvis, el cual, a través de sus encantos y el poder que generaba en aquel entonces, logra, de cierta forma, poseer la vida de Priscilla. Desde un comienzo resulta un poco extraño e incómodo la diferencia de edad entre ambos, al parecer, es mucho más fácil saberlo que verlo directamente representado en la pantalla grande. Coppola, a través de escenas con perspectivas mucho más bajas de Priscilla, a diferencia de los demás personajes, logra plasmar esta realidad, resaltando en conjunto, su belleza y la inocencia de la joven. Esto, a través de constantes tomas en donde se puede apreciar la sumisa mirada que le entregaba Cilla —apodo con el cual Elvis se dirigía a su esposa— a este hombre, que llega con su innegable encanto, para ofrecerle una vida de ensueños.

Una primera mitad de la película bastante tranquila, con una fotografía fascinante, en donde resaltan colores neutros y un tanto melancólicos, tratando de plasmar la época de guerra e incertidumbre en la que se encontraban. Poco a poco el escenario comienza a cambiar y se advierte un giro radical en la historia, en donde se puede apreciar a Priscilla intentando encajar en un mundo lleno de luces y exposición, pero también mucha soledad.  

Aislamiento y soledad en una vida de ensueños 

Tal como se venía revelando en un principio, Priscilla, en la segunda mitad de la película, comienza a relatar una nueva historia, en donde deja atrás su papel de una niña de familia conservadora y personifica a una mujer —aun siendo menor de edad— viviendo la vida junto a Elvis en Graceland, la mansión del cantante. La fotografía rápidamente comienza a fusionarse con colores más pasteles, con tomas mucho más cálidas y llenas de luz, buscando reflejar la transformación que comienza a experimentar la joven. 

Cambios de looks y una vida mucho más nocturna, son la base en la relación de ambos, esto acompañado de clases matutinas para Priscilla, como promesa hacia sus padres, de poder graduarse pronto de la escuela. Por otro lado, el cansancio y el estrés de Elvis, poco a poco fueron contagiando a Priscilla y se puede observar como ambos comienzan a consumir, desmedidamente, medicamentos para poder lidiar con sus agitadas vidas.  

Resulta fácil de captar cómo Sofia Coppola trata de quitarle el protagonismo a Elvis en la película, enfocándose directamente en darle fuerza a la voz y a la historia de la joven, pero de cierta forma, la actriz Cailee Spaeny no logra profundizar en su totalidad con la realidad que Priscilla está viviendo, pasando a segundo plano, quitándole consistencia a la soledad y al aislamiento que comienzan a formar parte de su vida. Es así como Elvis toma un protagonismo, al parecer, no intencionado por la directora, ya que se comienza a conocer otra faceta del cantante, transformándose rápidamente en la historia de un hombre dominante que crea a su mujer perfecta, a base de directrices y posesión sobre la vida de la joven, todo esto camuflado como una idílica historia de amor. Es por eso que se vuelve realmente imposible continuar con la conexión plena en Priscilla.

Priscilla, una película que narra lo más íntimo en la vida de Elvis, bajo la mirada de su esposa, la cual vive una realidad bastante tormentosa y que nunca se le dio la pantalla para visibilizar, más aún, que la unión que existió entre el rey del rock y Cilla siempre fue considerada una idílica historia de amor, pero en la realidad estaba muy lejos de serlo.

Priscilla se estrena el 28 de diciembre en los principales cines del país.

A continuación, el tráiler oficial de Priscilla: